El Tío. Foto: Pablo Amankay
Buscando imágenes actuales sobre las minas de Potosí (Bolivia) me enteré que los indígenas le rinden culto al Tío, considerado esposo de Pachamama (Madre Tierra) y dios protector de las minas. Cada día, al ingresar a los socavones, le piden protección y buena fortuna con el metal precioso. Como ofrenda le dejan hojas de coca, bebidas alcohólicas y cigarrillos. Durante su fiesta central, cada 1 de agosto, se le sacrifica muchas llamas.
En el blog "Bolivia Actual" encontré que los mineros "hacen una ceremonia con los ojos casi cerrados y sin mirar al Tío: le prenden un cigarrillo y le mojan los ojos con alcohol de 96º y luego de unas palabras se toman un sorbo del alcohol. Esperan que esto les ayude a encontrar la veta de mineral, pero no pueden ir a la iglesia porque las señales abandonan a los mineros".
Sabíamos que en tiempos coloniales Potosí era considerada "la puerta del infierno", pero esto es realmente sorprendente.
Hola Arturo:
ResponderBorrarMuy interesantes las fotos. Fíjate que el “tío” tiene la forma del Diablo, de color rojo, cuernos y patas de cabra. En el Perú existe también la tradición de “el muqui” (escrito también como Muki), un enano rubio de color rojo con cuernos que habita en las cuevas y ayuda a los mineros a encontrar las vetas a cambio de coca, alcohol, cigarrillos e, incluso, los favores sexuales de la mujer del minero. Estas descripciones conectan a los dos personajes, pero no son iguales pues mientras en Potosí el Tío es esposo de la Pachamama, el muqui es un geniecillo.
El origen de ambos personajes parece derivarse, en parte, de la mitología europea en donde la idea de geniecillos que habitan cuevas y bosques y ofrecen a la gente encontrar tesoros a cambio de favores o determinados productos. En los Andes centrales, por la influencia de los doctrineros católicos, la gente andina entendió que todo ser sobrenatural que no estuviera oficialmente reconocido y representado por la iglesia tenía que vincularse a las fuerzas demoniacas. Así mismo, la doctrina católica, al establecer el cielo como el lugar habitado por Dios, los ‘ángeles, la Virgen María (recordemos que la Virgen “subió a los cielos”), por oposición estableció el subsuelo como el lugar donde se encontraba el infierno. La mina, al ser una entrada al interior de la tierra era también, al menos potencialmente, una entrada al infierno por lo que tenía que estar habitada por personajes de aspecto demoniaco, aunque si perder su papel de protectores y dadores de favores.
Tres hechos interesantes que se observan en las fotos. Primero, los tres tíos presentan grandes penes erectos. Eso es un símbolo, no solo de su vigor masculino, sino también de su poder penetrador a su esposa la Pachamama, poder necesario cuando se abren las minas y se busca encontrar los tesoros guardados en el interior de ella, es decir las vetas de minerales y metales preciosos con los que el Tío preñó a la Pachamama. Segundo, la cantidad de coca, cigarrillos, y serpentinas. Es que estos personajes solo protegen si es que primero reciben esos obsequios. Es un dame para poder darte. Lo mismo se aplica para otros personajes andinos como el Ekeko. Tercero, la presencia de mujeres en las minas. Hasta hace poco escuchaba de problemas en ciertas minas cuando mujeres geólogos intentaban entrar a las mismas. Algunos mineros se oponían, o al menos mostraban gran preocupación ya que la mina (la Pachamama) solo podía ser penetrada por hombres. La presencia de mujeres solo acarrearía celos en la Pachamama y la posibilidad de que ocurriesen derrumbes o se desprendieran gases tóxicos. Con la aparición en los últimos años de más mujeres vinculadas de muchas maneras a la actividad minera, esas ideas podrían ya estar cediendo.
Joaquín.
Este dios "Tío", con forma de diablillo, es simpático y terrible, además de algo "viciosillo", ya que le ofrendan alcohol, tabaco y hojas de coca. Se supone que los mineros quieren tenerlo contento para que les sea propicio. Curiosa tradición.
ResponderBorrarUn saludo.
Mi abuelo, que fue minero en Morococha, me contó sobre el Muqui, pero lo del Tío de Bolivia me sorprendió recientemente.
ResponderBorrarOtro dato curioso es que en tiempos incaicos le decían "Supay" a un geniecillo que según Domingo de Santo Tomás (quechuista del siglo XVI) podía ser "bueno o malo" con los hombres. En la etapa colonial los españoles consideraron que Supay es el Diablo. Hoy en día, en Puno y Bolivia, les llaman "Supayas" a los danzantes de la "Diablada".
Hola Arturo,
ResponderBorrarMuy interesante tu entrada sobre "El Tío". Tengo entendido que el tío prohibe el ingreso de las mujeres en las minas.Estoy con unas amigas escribiendo algo sobre las mujeres geólogas y me gustaría pudieras darme algun dato sobre la historia del machismo en la minería.
Saludos,
Tambien, ha veces, ellos toman una prostituta a la mina y ella baila sin ropas en frente del Tio. El es un dios mal hahahha.
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