2 feb 2009

CLAUSURARON EL BAR QUEIROLO

Foto antigua del bar Queirolo del centro de Lima. Archivo Courret.

Después de tiempo pasaba hoy por el cruce entre los jirones Quilca y Camaná cuando me sorprendió la imagen del viejo bar y restaurant Queirolo con afiches de la Municipalidad de Lima que anunciaban su clausura sin precisar las causas ni la duración del castigo. Aunque solo alguna vez ingresé a este local -y fue para almorzar- sé que por sus ambientes muchos artistas e intelectuales de varias generaciones vivieron inolvidables momentos de bohemia y de inspiración.

Aquí les dejo las dos fotografías captadas por mi celular la tarde de hoy:


VERDADERAS FOTOS DE TUMSHUKAIKO

Tumshukaiko es un importante centro ceremonial de orígenes precerámicos (2500 a.C.) ubicado a dos kilómetros de Caraz en el Callejón de Huaylas. Hoy, el diario Perú 21 publicó la noticia del reinicio de las excavaciones en este Complejo Arqueológico y el proyecto de su puesta en valor con fines turísticos. Solo que en lugar de poner una foto de este atractivo ancashino los periodistas colocaron la Pirámide Mayor de Cahuachi que se ubica en Nazca (Ica). ¡Qué roche!

Googleando un poquito encontré verdaderas imágenes de Tumshukaiko en Caraz (al fondo se ve el nevado Huandoy):

Foto: MuniCaraz

Foto: Skycrapercity

31 ene 2009

LAS BALSAS TALLANES

Balsa tallán. Imagen: SDP

Hoy, en el diario El Comercio se publicó un artículo de César Robles sobre los tallanes que dominaron Tumbes y Piura hasta la llegada de los españoles. Los tallanes fueron los primeros indígenas que se hicieron amigos de Francisco Pizarro creyendo que era enviado de los dioses para castigar al Inca Atahualpa. Por eso en sus tierras el Conquistador fundó su primera ciudad en el Perú: San Miguel de Tangarará (hoy Piura).

Del interesante artículo de Robles quiero destacar la parte en que cita al cronista Pedro Cieza de León para confirmar que los tallanes estuvieron entre los más grandes marinos del antiguo Perú:

Sin embargo, lo que habría de caracterizar a los tallanes sería su dominio sobre el mar a través de la navegación a vela. El cronista Cieza de León describe el encuentro entre Bartolomé Ruiz y los balseros tallanes:

“Y navegando su camino otro día, a ora de nona, vieron venir por la mar una balsa tan grande que parecía navío y arribaron sobre ella con la nao y tomárosla con quinze o veynte yndios que en ella venían vestidos con mantas, camisetas y en ávito de guerra; y donde a un rato vieron otras balsas con gente”.

Por algo don Miguel Grau también fue piurano.