Cristóbal Colón Fontanarrosa (1453-1505). Dibujo: Nestor Taylor.
Las carabelas de Colón
Todos conocen los nombres de las “tres carabelas” que utilizó Cristóbal Colón en su gran viaje de 1492, pero pocos recuerdan los orígenes y características de cada nave. Retomamos el tema del “Descubrimiento de América" con algunos interesantes datos de la “Niña”, la “Pinta” y la “Santa María”.
Réplica de la "Santa María" en el Muelle de las Carabelas (Huelva, España).
Foto: SantiMB (Flickr).
Empezamos con la “Santa María” que no era precisamente una carabela, sino una nao. Tenía 36 metros de eslora, un amplio casco, su envergadura era maciza, tenía una mayor capacidad y contaba con un castillete de dos pisos en la proa. Su desventaja era ser muy pesada y lenta, lo que disgustaba mucho a Cristóbal Colón. En el segundo piso estaba la camareta del Almirante. Fue construido en el noroeste de España y su primer nombre fue la “Gallega”. Su dueño era Juan de la Cosa.
Réplica de la "Pinta". Foto: SantiMB (Flickr).
Las carabelas “Pinta” y “Niña” fueron entregadas a Colón por orden de la Corona española, merced a una antigua deuda que tenía el pueblo con los Reyes Católicos. Eran de menor tamaño y capacidad que la “Santa María” y sus castilletes de proa eran de un solo nivel. La “Pinta” fue construida en Palos de la Frontera (suroeste de España) y la llamaron así porque su armador se apellidaba Pinto. Tenía una eslora de 29 metros y fue la más veloz de las tres naves. La “Niña” fue construida en Moguer (cerca de Palos), y llevaba ese nombre por su armador y dueño, don Juan Niño. Su eslora medía 21 metros.
Réplica de la "Niña". Foto: SantiMB (Flickr).
En el histórico viaje de 1492, la "Santa María" fue capitaneada por Cristóbal Colón, la "Pinta" por Martín Alonso Pinzón y la "Niña" por Vicente Yañez Pinzón.
Hola don Arturo, muy buena entrada de las carabelas colombinas. Espero algún día visites Huelva la andaluza, y la gallega Bayona-Baiona, lugares tan colombinos.
ResponderBorrarDecirte también que me encantó el Nobel para tu compatriota don Mario. Alguna vez le he visto por Madrid, por la calle, pues vive en el centro de la capital española. Este Nobel es el Nobel en pleno Bicentenario, un homenaje a nuestra comunidad de paises hispanos, un Nobel para nuestro idioma y para las dos orillas, en estos tiempos de reencuentro hispano y americano. ¿Qué dirían aquellos San Martín y Bolívar si levantasen la cabeza? Es un honor que don Mario tenga también pasaporte español, todo un Inca Garcilaso del siglo XXI.
Saludos y estate atento a mi blog que ya sigo con entradas mexicanas.
Juan Pedro.
Uno ve esos barcos, y no puede creerlo.
ResponderBorrarNadie podia tener el coraje de lanzarse a la aventura en eso.
Un abrazo.
En efecto, como bien dices, no eran tres carabelas, sino dos, la Santa María era una nao.
ResponderBorrarUn saludo.
Gracias Juan. Como bien dices, Vargas Llosa representa muy bien los estrechos vínculos y la amistad entre España y Perú.
ResponderBorrarQue tal Gaucho. Con razón hasta los bravos marinos andaluces lo pensaban dos veces antes de inscribirse.
Hola Cayetano. Lo curioso es que era la nave que menos le gustaba a Cristóbal Colón. Era difícil de maniobrar y, como sabes, encalló en La Española.
Saludos.
Arturo, bien vale la aclaración de que Juan de la Cosa fue, además de como bien decis, el dueño de la Santa María, un excelentísimo cartógrafo.
ResponderBorrarSu aporte más importante fue la elaboración del primer mapa que muestras las costas americanas después del descubrimiento (antes hubo quienes lo plasmaron en un mapa, pero extraoficialmente al descubrimiento jeje).
Slds!