Colón. |
El regreso de Cristóbal Colón a España
Texto: Freddy Gómez
Para regresar a la Península Ibérica Cristóbal Colón cogió una corriente marina favorable (Corriente del Golfo), lo que le permitió avanzar rápidamente. Al comenzar el mes de febrero de 1493, las carabelas la “Niña” y la “Pinta” alcanzaron el grado 36 de latitud norte y pusieron la proa apuntando al este, rumbo a las islas Azores. Sin embargo, cuando ya estaban cerca, el 11 de febrero se desencadenó una terrible tormenta que duró cuatro días. Los feroces vientos y temibles olas estuvieron a punto de hundir las naves, pero la experiencia del Almirante y la pericia de sus compañeros andaluces lograron evitarlo. La tempestad solo logró separar a la “Pinta”, la que finalmente arribó al puerto de Baiona, en el noroeste de España.
El día 18, la “Niña” ancló en la isla de Santa María, en el archipiélago de Azores, pero sus tripulantes fueron recibidos con hostilidad por el gobernador portugués de la isla, Juan de Castanheda. El 24 de febrero, la nave enrumbó a las costas de Andalucía, pero en la noche del 4 marzo una tempestad empujó la carabela hacia la desembocadura del río Tajo, en Lisboa, Portugal. En la mañana siguiente, ancló en el puerto de Rastelo y los tripulantes se encargaron de propagar la noticia de la hazaña que habían logrado. Los lusitanos quedaron maravillados viendo a los aborígenes y animales exóticos que traían los hispanos.
El 8 de marzo, Colón recibió la invitación del rey Juan II para entrevistarse en el monasterio de Santa María de las Virtudes. Al día siguiente el monarca luso hizo muchas preguntas sobre la ubicación y riqueza de las islas descubiertas. El Almirante le respondió cortésmente y le recordó que antes de acudir a los Reyes Católicos, había solicitado su ayuda, pero fue rechazado. Después de dos audiencias más, Juan II se despidió del genovés y le permitió abandonar Lisboa el 13 de marzo. La “Niña” enrumbó al sur y al día siguiente dobló el cabo de San Vicente y entró en aguas castellanas. Fue el viernes 15 de marzo de 1493 el día en que Colón y sus bravos compañeros llegaron por fin al puerto de Palos, donde fueron recibidos con mucha alegría. De inmediato, Colón envió una carta a los Reyes Católicos, que se hallaban en Barcelona, notificando sus importantes descubrimientos. Continúa aquí >>
El día 18, la “Niña” ancló en la isla de Santa María, en el archipiélago de Azores, pero sus tripulantes fueron recibidos con hostilidad por el gobernador portugués de la isla, Juan de Castanheda. El 24 de febrero, la nave enrumbó a las costas de Andalucía, pero en la noche del 4 marzo una tempestad empujó la carabela hacia la desembocadura del río Tajo, en Lisboa, Portugal. En la mañana siguiente, ancló en el puerto de Rastelo y los tripulantes se encargaron de propagar la noticia de la hazaña que habían logrado. Los lusitanos quedaron maravillados viendo a los aborígenes y animales exóticos que traían los hispanos.
El 8 de marzo, Colón recibió la invitación del rey Juan II para entrevistarse en el monasterio de Santa María de las Virtudes. Al día siguiente el monarca luso hizo muchas preguntas sobre la ubicación y riqueza de las islas descubiertas. El Almirante le respondió cortésmente y le recordó que antes de acudir a los Reyes Católicos, había solicitado su ayuda, pero fue rechazado. Después de dos audiencias más, Juan II se despidió del genovés y le permitió abandonar Lisboa el 13 de marzo. La “Niña” enrumbó al sur y al día siguiente dobló el cabo de San Vicente y entró en aguas castellanas. Fue el viernes 15 de marzo de 1493 el día en que Colón y sus bravos compañeros llegaron por fin al puerto de Palos, donde fueron recibidos con mucha alegría. De inmediato, Colón envió una carta a los Reyes Católicos, que se hallaban en Barcelona, notificando sus importantes descubrimientos. Continúa aquí >>