Hace algunos días posteamos la nota de EFE sobre las posibles causas de la caída de Caral; sin embargo el arqueólogo Mario Advíncula no cree que los desastres naturales expliquen suficientemente el final de una civilización.
La naturaleza acabó con la civilización más antigua del Perú (sic)
Mario Advíncula, vía Norte Chico Perú
Los arqueólogos tienen una discusión bastante antigua sobre el efecto de los “desastres naturales” sobre las sociedades, principalmente las que tuvieron niveles de organización social compleja (curacazgos, estados o grandes civilizaciones). Michael Moseley hace varias décadas sostuvo que una serie de terremotos destruyeron el sistema de canales de la civilización Moche, con lo cual se trajo una gran crisis y el fin de su cultura. Recuerdo las críticas del Dr. Duccio Bonavia al respecto, en las cuales él sostenía que para que un terremoto destruyera el sistema hidráulico, debía de haber sido un cataclismo de características fabulosas, que no dejaría ninguna edificación en pie y por último que los canales que supuestamente había sido desconectados por el terremoto, en realidad nunca funcionaron, porque debieron estar mal diseñados.
La arqueología ha registrado para el fin de Moche a varios fenómenos de niño grandes, sin embargo, nos aunamos a la opiniones que sostienen que los “desastres naturales” no sean tomados como la razón de quiebre del orden moche, sino como un catalizador de factores de desintegración y de crisis económica sociales, que fueron producto de las contradicciones sociales de la época.
Ahora salen las notas periodísticas respecto a que los fenómenos naturales pusieron fin a lo que algunos llaman la “civilización Caral”. Esperamos leer la nota con los datos científicos que sostengan esta propuesta sobre los desastres naturales y el fin de la ocupación de centros ceremoniales en el norte chico.
Los arqueólogos tienen una discusión bastante antigua sobre el efecto de los “desastres naturales” sobre las sociedades, principalmente las que tuvieron niveles de organización social compleja (curacazgos, estados o grandes civilizaciones). Michael Moseley hace varias décadas sostuvo que una serie de terremotos destruyeron el sistema de canales de la civilización Moche, con lo cual se trajo una gran crisis y el fin de su cultura. Recuerdo las críticas del Dr. Duccio Bonavia al respecto, en las cuales él sostenía que para que un terremoto destruyera el sistema hidráulico, debía de haber sido un cataclismo de características fabulosas, que no dejaría ninguna edificación en pie y por último que los canales que supuestamente había sido desconectados por el terremoto, en realidad nunca funcionaron, porque debieron estar mal diseñados.
La arqueología ha registrado para el fin de Moche a varios fenómenos de niño grandes, sin embargo, nos aunamos a la opiniones que sostienen que los “desastres naturales” no sean tomados como la razón de quiebre del orden moche, sino como un catalizador de factores de desintegración y de crisis económica sociales, que fueron producto de las contradicciones sociales de la época.
Ahora salen las notas periodísticas respecto a que los fenómenos naturales pusieron fin a lo que algunos llaman la “civilización Caral”. Esperamos leer la nota con los datos científicos que sostengan esta propuesta sobre los desastres naturales y el fin de la ocupación de centros ceremoniales en el norte chico.
Hola Arturo:
ResponderBorrarYo estoy también de acuerdo. Las ideas catástrofista de Moseley han sido duramente criticadas y nunca presentó mayores evidencias. Me sorprende que todavía las sustente y las trate de aplicar a Caral. Los terremotos no provocan el fin de ningua sociedad, especialmente compleja. Como tampoco Meganiños, erupciones volcánicas, sequías y otros desastres naturales. Es como decir que el imperio Romano desapareció porque erupcionó el Vesubio o que el Estado Peruano desapareció con el terremoto de 1970 o el Niño de 1983.