Cusqueños de Tinta, tierra de los Túpac Amaru. Foto: Martín Chambi.
Fieros combates desangraron aún más el sur del Cusco y la meseta del Collao, hasta que el inspector general español José del Valle ofreció un indulto en nombre del virrey Jáuregui y el rey Carlos III. Diego Túpac Amaru decidió acogerse a la oferta de paz comprendiendo que ya era muy lejana la posibilidad de derrotar al ejército realista.
El 27 de enero de 1782 se firmó el Tratado de Paz de Sicuani por el cual el caudillo y muchos de sus compañeros de armas juraron fidelidad al Rey de España; sin embargo poco después el jefe indígena fue capturado. Lo acusaron de seguir enviando cartas o otros rebeldes, tener escondidas más armas y de no devolver los caudales sustraídos durante la sublevación.
Su ejecución fue atroz. Lo sacaron de prisión, lo ataron a un caballo que lo arrastró por las calles de Sicuani. Antes de ahorcarlo en la plaza principal, lo torturaron con una gran tenaza de hierro arrancándole piel y músculos de su cuerpo.
Bibliografía:
- DURAND Flores, Luis, El plan político de Túpac Amaru, editorial AVE, Lima , 1993.
- VALCARCEL, Carlos Daniel, La Rebelión de Túpac Amaru II, editorial Peisa, Lima, 1973.
- VEGA, Juan José, Historia General del Ejército Peruano, Tomo III, imprenta del Ministerio de Guerra, Lima, 1981.
Fieros combates desangraron aún más el sur del Cusco y la meseta del Collao, hasta que el inspector general español José del Valle ofreció un indulto en nombre del virrey Jáuregui y el rey Carlos III. Diego Túpac Amaru decidió acogerse a la oferta de paz comprendiendo que ya era muy lejana la posibilidad de derrotar al ejército realista.
El 27 de enero de 1782 se firmó el Tratado de Paz de Sicuani por el cual el caudillo y muchos de sus compañeros de armas juraron fidelidad al Rey de España; sin embargo poco después el jefe indígena fue capturado. Lo acusaron de seguir enviando cartas o otros rebeldes, tener escondidas más armas y de no devolver los caudales sustraídos durante la sublevación.
Su ejecución fue atroz. Lo sacaron de prisión, lo ataron a un caballo que lo arrastró por las calles de Sicuani. Antes de ahorcarlo en la plaza principal, lo torturaron con una gran tenaza de hierro arrancándole piel y músculos de su cuerpo.
Bibliografía:
- DURAND Flores, Luis, El plan político de Túpac Amaru, editorial AVE, Lima , 1993.
- VALCARCEL, Carlos Daniel, La Rebelión de Túpac Amaru II, editorial Peisa, Lima, 1973.
- VEGA, Juan José, Historia General del Ejército Peruano, Tomo III, imprenta del Ministerio de Guerra, Lima, 1981.