21 may 2008

COMBATE DE IQUIQUE

La Esmeralda y el Huáscar el 21 de mayo de 1879, en Iquique.
Pintura: Thomas Somerscales.


El Combate Naval de Iquique

Autor: Melitón Carvajal Pareja


La escuadra chilena llevaba 30 días incursionando contra los puertos del sur y la opinión pública demandaba que se rompiese el bloqueo de Iquique. El gobierno peruano ordenó el zarpe de la escuadra. El punto focal del drama es el combate de Iquique, con su carga de luz y de sombra, de triunfo y de fracaso.

La saga empieza cuando la escuadra zarpa del Callao la noche del 15 de mayo con destino a Arica. El 20 de mayo la 1ª división al mando del capitán de navío Miguel Grau, zarpó de ese puerto para amanecer el 21 en Iquique. Grau, va al comando del monitor Huáscar, Guillermo More al de la fragata Independencia. Sus instrucciones: batir a la corbeta Esmeralda y a la cañonera Covadonga que sostenían el bloqueo. A las 6.30 a.m., al avistar las naves chilenas el doble humo de las peruanas, maniobraron en el interior del puerto para situarse mejor. El Huáscar y la Independencia se acercan velozmente, estrechando distancias.
Grau ordena zafarrancho de combate. A las 8.30 se libra el combate.

El autor sostiene que el encuentro fue desigual, pues como dice Grau en su informe, los disparos de los buques chilenos eran certeros, no así los del Huáscar. Grau decide atacar a la Esmeralda con el espolón. A partir de las 11 de la mañana Grau embiste tres veces con el espolón; en uno de los embates, Arturo Prat, comandante de la Esmeralda, cae sobre la cubierta del monitor, y sucumbe de un hachazo en la cabeza. El último espolonazo parte y hunde casi instantáneamente a la nave chilena. Momento terrible, dice Carvajal, terrible para los hombres de la Esmeralda, como para los del Huáscar, quienes, siguiendo la orden de su comandante, arrían de inmediato los botes para salvar a los náufragos. A bordo, los chilenos rescatados, gritan: “¡Bravo Comandante Grau! Vivan los valientes e hidalgos peruanos!” A lo que contestan la oficialidad y tripulantes: “¡Bravo valientes chilenos de la Esmeralda, solo cumplimos con nuestro deber!”. Allí nació la leyenda de Grau, el Caballero de los Mares.

Otra fue la suerte de la Independencia, que se perdió en el intento de espolonear a la Covadonga; quedó varada a la altura de punta Grueso, en un bajo de roca no marcado en las cartas. La conducta de Condell, comandante de la Covadonga, fue diametralmente opuesta: cuando el buque se hundía, mantuvo el fuego contra la tripulación inerme. Se dijo que la falta de disciplina y de ejercicios de artillería habrían causado la pérdida de la Independencia, aunque Carvajal concluye que fue una combinación del azar y de una táctica equivocada de More, y que, como es usanza en la mar, la responsabilidad recae sobre el comandante. No hubo un juicio contra More, pero la carga moral lo llevó a inmolarse el 7 de junio de 1880 como jefe de la batería del Morro de Arica.. Se perdió el mejor buque de la escuadra peruana. La Independencia, con iguales condiciones marineras que el Huáscar, tenía sin embargo mayor capacidad combativa: con más poder de fuego por andanada podía causar averías de mayor consideración en un enfrentamiento con los blindados. El pequeño monitor quedó solo para hacer la lucha en el mar.

Vídeo del Combate Naval de Iquique


* VER EL DOCUMENTAL COMPLETO EN VIDEOS DEL PERÚ.

2 comentarios:

  1. Anónimo1:52 p.m.

    ohh!! los chileos no dijeron eso... En Chile al capitan Grau se le reconoce por enviarle la billetera de Pratt a su viuda C. Carvajal, no crees que si de verdad hubiesen empezado a gritar esas cosas los chilenos tambien lo contaria la histroia de chile. Los soldados chilenos tenian el orgullo de ser unos de los pocos paises en el mundo que NUNCA perdió una guerra, y aun lo somos

    ResponderBorrar
  2. Anónimo9:23 a.m.

    Lamentablemente, en la Guerra del Pacífico, se perdieron valiosas vidas por ambos bandos...Una Guerra nunca es buena y nunca ha demostrado que es la paz definitiva; siempre por uno u otro motivo, por la más mínima insensatez de los gobiernos... Otra sería la historia de nuestros pueblos, en vez de luchar por una supremacía y quedarse tranquilo con lo que se tiene, que llegar a estas deplorables condiciones.
    Obviamente que, Perú, tiene su versión de este combate, al igual que la tiene Chile...Eso no va a cambiar nunca, pero siempre es lamentable un enfrentamiento entre "hermanos" como suele decirse y así aconteció lamentablemente. Es muy reconocido en Chile la hidalguía y caballerosidad de Miguel Grau Seminario, héroe insigne de vuestra patria y eso no debería ser puesto en duda ni ser targiversado por unos u otros....Solo me resta decir, que hay que dejar de lado el odio y la tosudez y luchar, de verdad, por la integración de nuestros pueblos así como debió de haber sido siempre.
    Un saludo desde Chile de un humilde chileno conocer de algo de historia.
    Nickobre

    ResponderBorrar

Gracias por leer y comentar en AMAUTACUNA DE HISTORIA.